Después de la pérdida del AAA, Trump quiere asegurar su BBB
Monthly House View - Junio 2025 - Descagar aqui
Los particulares estadounidenses siguen siendo positivos sobre su mercado de acciones y continúan invirtiendo sus ahorros en él. Pero, ¿hasta qué punto? ¿Y hasta cuándo? La pregunta sigue abierta, especialmente cuando se conocen las crecientes expectativas de los hogares respecto a las medidas fiscales prometidas por Donald Trump. Mientras se espera la posible concreción de las reducciones de impuestos previstas por la ”Big Beautiful Bill Act” (o ”BBB1”), los atrasos en los pagos de las tarjetas de crédito alcanzan niveles nunca vistos en los últimos 20 años, aumentando casi un 60% en volumen en los últimos tres años para representar el 20% del total (es decir, un impago de cada cinco). Algunos estadounidenses incluso recurren a sus ahorros para la jubilación para cubrir gastos corrientes como el alquiler o los gastos médicos.
La discusión sobre este presupuesto, que debería costar al menos 3.000 billones de dólares en 10 años, se produce justo cuando Moody’s, la última agencia en calificar la deuda de los EE. UU. con AAA, ha degradado esta calificación. Destaca la trayectoria negativa del déficit, que debería seguir deteriorándose y alcanzar el 9% en 10 años según sus previsiones. Este contexto presupuestario tenso se vuelve aún más difícil debido a la creciente polarización de la economía estadounidense, añadiendo una capa de complejidad a los desafíos financieros del país.
De hecho, es sorprendente ver hasta qué punto la economía de los estados demócratas, llamada “economía azul”, difiere de la de los estados republicanos, llamada “economía roja”. Es casi como si se tratara de dos países distintos. Hoy en día, los estados azules tienen una economía cuyo PIB es equivalente al de China, es decir, aproximadamente dos tercios de la economía estadounidense. En comparación, la economía roja representa alrededor de un tercio del PIB de los Estados Unidos, es decir, más de 10.000 billones de dólares. Sin embargo, el número de millonarios aumenta más rápidamente en la economía roja, que ahora cuenta con casi la mitad de los estadounidenses con ingresos superiores a un millón de dólares. Además, las expectativas en materia de inflación y crecimiento varían enormemente entre estas dos zonas. Incluso los bienes consumidos y las preferencias culinarias difieren considerablemente. En cuanto a las carteras bursátiles, las de los republicanos tienen un rendimiento notablemente mejor.
Mientras la economía estadounidense parece más dividida que nunca, es crucial encontrar formas de financiar el plan fiscal BBB. El programa de reducción de costos y personal del sector público, gestionado por el “DOGE”, no ha dado los resultados esperados. El objetivo inicial era reducir los gastos en 2.000 billones de dólares, pero hasta ahora, solo se han ahorrado 160 billones.
La otra fuente de financiación privilegiada por el gobierno es la implementación de derechos de aduana. La administración estadounidense se ha fijado el ambicioso objetivo de firmar 90 acuerdos en 90 días. Hasta la fecha, solo se han concluido dos acuerdos importantes: uno con Gran Bretaña y otro con China. Considerando que un proyecto de tal magnitud debería tomar años, es muy probable que los otros 88 acuerdos no se firmen antes de la fecha límite del 8 de julio y que la música diplomática de las negociaciones bilaterales sobre este tema continúe sonando durante el verano.
En este contexto, las negociaciones comerciales entre los Estados Unidos y Europa serán cruciales para la evolución futura de la inflación. Hemos revisado a la baja las previsiones de crecimiento mundial para el próximo año, con una probable convergencia de los crecimientos estadounidense y europeo. La inflación debería permanecer elevada en los Estados Unidos, mientras que debería normalizarse en Europa.
En nuestras carteras, seguimos fuertemente diversificados, con una preferencia por las acciones de las zonas que se benefician de la reactivación económica y una baja exposición a la duración estadounidense en la parte de renta fija. Paralelamente, el oro sigue siendo el valor refugio por excelencia, mientras que nos mantenemos cautelosos respecto al dólar. Los activos no cotizados siguen siendo atractivos, y en esta edición abordaremos el interés de poseer deudas privadas, especialmente a través de fondos semi-líquidos en las asignaciones de cartera.
Monthly House View, 23.05.2025. - Excerpt of the Editorial

04 junio 2025